Concurso

Emplazamiento Ronda Sur. Burgos Promotor Ayuntamiento de Burgos Autores Sabine Müller, Andreas Quednau

Realización

Emplazamiento Ronda Sur. Burgos Promotor Ayuntamiento de Burgos Autores Sabine Müller, Andreas Quednau
Objeto del encargo
La ciudad de Burgos estaba muy interesada en el proyecto ganador ya que transformaba un terreno baldío en un barrio de viviendas atractivo. Pero la ciudad no era la propietaria de los terrenos. Tras el concurso, un promotor privado –Aragón Izquierdo S.L.- adquirió los terrenos. Dado el fuerte interés de la ciudad en el proyecto, en octubre de 2001, el promotor encargó al equipo SMAQ el planeamiento urbanístico para esa parte de la Ronda Sur, en colaboración con un arquitecto local. En este momento están aprobados y en fase de ejecución el planeamiento y la urbanización. El Ayuntamiento está negociando con el promotor privado el 10% de aprovechamiento de suelo que le corresponde para poder contratar al equipo ganador una parte de la edificación.

Desarrollo

Los condicionantes financieros impuestos por el promotor eran muy ajustados y se pidió al equipo de arquitectos adaptar el proyecto: 30% del espacio fue cedido para espacios públicos y calles. El resto de los espacios privados se debían explotar al máximo. El aparcamiento subterráneo se llevó a superficie y los edificios crecieron en altura para incrementar la densidad y edificabilidad del área.
De acuerdo con los responsables municipales, se decidió utilizar la ficha urbanística marcada en el Plan General como guía, con la opción de adaptarla al diseño del proyecto. Por otra parte, una gran proporción de los solares apartados por el promotor para la comunidad podían ahora ser utilizados como equipamientos deportivos, un aspecto importante del proyecto de concurso.
Después de una fase intermedia que comprendía cuatro edificios, el número de edificios se redujo a tres. El planeamiento designaba como límite permeable el extremo sur de la ciudad de Burgos. La división entre solares públicos y privados refleja el modelo del paisaje agrario preexistente en el extremo de la ciudad así como el perfil topográfico de la zona. La distribución volumétrica de los edificios adopta la tipología en forma de lazo del concurso, con las unidades de vivienda elevadas creando unos patios que se conectan con el paisaje. Se crea por tanto un paisaje artificial dentro de la topografía del valle. Estas torres mantienen las vistas desde los apartamentos, al tiempo que establecen la imagen de la ciudad de Burgos cuando se entra desde el sur.